Función callejera del teatrino de títeres. El rostro de mi padre bajo el corpulento sonriente (arriba extrema derecha)

Octubre del  1947. A los dos años, con mis queridos juguetes.

Un año después, próximo a comenzar mi aventura musical. En el fondo, el teatrino desmontado. Se aprecian algunos nombres de sus fundadores.

Aproximadamente año 1920. María Luisa Anido con la guitarra de Antonio Torres.

23 de Agosto de 1956. Con la guitarra Antonio de Torres antes de iniciar mi primer concierto.

Conceptos de María Luisa Anido.

Febrero de 1958. En compañía de Mimita, orillas del Río Cosquín, Córoba.

Hacia 1967. María Luisa Anido y su representante, Enrique Omar Buschiazzo (Moscú y Kyoto)

Revista  “La Guitarra” – I

María luisa Anido retratada por Samuel Mallo López. El autor fue hermano de la guitarrista Consuelo Mallo López, quien tuviera de maestros a Jesús González, Aníbal Landrú y Domingo Prat.

Extracto del quinto ejemplar de la segunda época (Revista “La Guitarra”, pagina 47, 1926, Bs. As.). Su fundador, Juan Carlos Anido, contó entre sus colaboradores al pintor y dibujante Mallo López, quien más tarde se graduaría Doctor en Medicina, destacándose también como ensayista, poeta, crítico y conferencista.

Luego de un concierto, retratado en la oportunidad por Samuel Mallo López. No lo conocía personalmente, pero si estaba informado de su incondicional aporte a la revista de Juan Carlos Anido más de tres décadas antes (22 de noviembre de 1961, Olavarría, Bs. As.).

Más conceptos de maría Luisa Anido.

  1. Comienzo del Dúo Anido – Atreo. Atrás, piano que acompañó mi infancia.

Con Mimita de paseo por Siena. Instantes después de la imagen viviríamos momentos inolvidables con el Maestro Alirio Díaz, (a cargo de las clases magistrales en la academia Chigiana), junto a John Williams y si esposa; éstos si no recuerdo mal, estaban recién casados y alojados en nuestro mismo hotel (1964, Siena, Italia).

Luego de uno de nuestros conciertos. Pocos meses después Mimita cumpliría sus bodas de oro con la guitarra. El país entero se movilizó tributándole un homenaje que, según el diario “La Nación”, “… fue más importante rendido a un músico viviente argentino”. Adhirieron a este homenaje funcionarios e instituciones nacionales, provinciales y municipales de cultura, oficiales y privadas; universidades nacionales; representantes de todos los estamentos artísticos y culturales de la nación. Asimismo personalidades artísticas como Andrés Segovia, Alberto Ginasterra, Benito Quinquela Martín, Joaquín Rodrigo, Roberto García Monillo, Antonio Berni, Emilio Pujol, entre otros (1966).

Habían finalizado hacía poco las presentaciones del dúo con Mimita. Regresábamos al país con mi esposa Graciela López Cazenave, también discípula de María Luisa Anido, luego de una extensa gira por México. Nuestra llegada coincidió con una iniciativa de la Comisión Municipal de Folklore de Cosquín, el Ateneo Folklórico de la misma ciudad y Dirección de Cultura de la Provincia; llevar a cabo la plaza Próspero Molina la primera “Semana Argentina de la Música”. En la oportunidad se ofreció en primera audición el público argentino el Concierto para guitarra y pequeña orquesta de Héctor Villa-Lobos, teniendo como huésped a la señora Arminda Neves de Almeida, viuda del célebre compositor brasileño. Desde el 13 al 19 de Enero de 1968, además de mi presentación acompañado por la Orquesta Sinfónica de Córdoba, participaron Antonio de Raco, Héctor Zeoli, Graciela López Cazenave, el Quinteto de Vientos de Córdoba, Brunilda Gianneo y los coros polifónicos de Cosquín y Córdoba. En casa, con Francisco Simplicio, poco después del Concierto estreno, en compañía de Mindinha Villa-Lobos y mi esposa (Enero de 1968, Cosquín, Córdoba).

Habían finalizado hacía poco las presentaciones del dúo con Mimita. Regresábamos al país con mi esposa Graciela López Cazenave, también discípula de María Luisa Anido, luego de una extensa gira por México. Nuestra llegada coincidió con una iniciativa de la Comisión Municipal de Folklore de Cosquín, el Ateneo Folklórico de la misma ciudad y Mi padre Enrique Omar Buschiazzo, José maría Fontova (entonces delegado del museo Heitor Villa-Lobos en argentina), Dr. Santos Sarmiento, co-fundador del Festival Nacional del Folklore de Cosquín, Arminda Neves de Almeida, mi madre María Ana Inés Ortolanis, el Maestro Mario Perini, conductor en la Orquesta Sinfónica de Córdoba y quien se expresa junto a Graciela.

1968. Mimita con sus discípulos durante un feliz encuentro en la ciudad de Córdoba. Luego, por los caminos que se iban abriendo en cada una de nuestras existencias, estos hermosos encuentros fueron cada vez mas distantes.

Pasaron varios años. Nos habíamos visto en Buenos Aires a mi regresi de una gira por España en Febrero de 1976. Mimita se aprontaba para fijar residencia en Barcelona, tierra de sus maestros Prat y llobet; Graciela y yo en San Juan, orientando en el arte de la guitarra a nuevas generaciones afectadas por el contagioso virus. La inmensa alegría de vernos nuevamente tuvo lugar en 1967, en Buenos Aires. Mimita celebraba sus 80 años en plena actividad, recibiendo un sentido homenaje que conto con auspicios de numerosos organismos y entidades culturales del país. En la imagen: Carlos Fulvio, Ketty Sáez Zamora, María Luisa Anido, Dr. León Benarós y Omar Atreo.